Decía que me odiaba mientras me besaba.
Tiradas en la cama,
Yo disfrutaba observarla en silencio con las manos en el pecho y los labios medio secos.
Los días calurosos,
se recogía el cabello mientras me llamaba perdedora.
Si estaba de buenas,
dejaba que la abrazara y sólo me tocaba cuando la ignoraba .
Si corría con suerte, me besaba en la frente y me susurraba que le encantaba.
No escuchaba nada con ella en la habitación, su sonrisa me consumía y sus manos me moldeaban cual arcilla .
Nunca le confesé el miedo que me daba el amor por ella. Con ella.
Tan opuestas nosotras pero tan complementarias.
Si mis ojos hablaran le dirían todo lo que mi corazón huraño se calla...
(Ella lo sabía)
Tal vez, por eso,
Siempre apartaba la mirada.
